jaajajajjajaaa me siento cual niña en 6 de enero descubriendo sus regalos¡¡¡ Hace pila que estoy con esta suerte de devaneo de si comienzo o no con mi propio blog y mira tú ¡helo aquí¡.-
En fin, ya luego de haber realizado los pasos correspondientes -3 pasos y verá que le sale así de fácil, promocionaba la página- me encuentro ante una hoja en blanco donde no se a ciencia cierta qué escribir pues a todo esto, ya son las 2.23 a.m, he venido del cine y si bien estoy un poco desvelada, no tanto como para pensar mucho en el contenido del blog. Digamos que estoy "probando, probando", como lo hiciese ante el micrófono la primer vez que salí en radio y me iniciaba en el programa Joven Tango, sintiéndome poco menos que Cristina Morán con aquella voz tan peculiar.
Qué loco todo, cómo pasa el mundo, la vida tan de prisa. Pareciese que si no nos subimos al tren de la "modernidad", quedamos vetustos, obsoletos, fuera de circulación por lo que se torna imprescindible "aggiornarnos".
Pero qué puedo decir? me siento alegre, he de admitirlo¡¡ y no logro sacarme esta sonrisa tonta de la boca, esa que se nos dibuja cuando presenciamos algo que nos causa mucha gracia pero no podemos reirnos abiertamente en ese momento, p.ej. en un velorio. Y todo solo porque hice yo solita, sin llamar a Hugo, mi amigo informático -es mucho mas que en esas áreas, pero le frecuento bastante con este rollo- para preguntarle "¿cómo hago un blog?".
Veré cómo sigue esta historia, ya probaré otras maniobras.
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