BIENVENIDA

miércoles, 23 de marzo de 2011

Caminando entre la niebla


Llegó el otoño. Entró con sus valijas de lluvia, hojas secas y viento; con sus días grises que convidan a la tristeza a instalarse en el alma.
Hace ya tiempo que tengo la sensación de estar sentada en el andén de la Terminal, esperando la llegada de un tren con destino “no importa donde”, que nunca llega. Ese desasosiego que sientes cuando sabes que  “algo” va o tiene que ocurrir en tu vida, pero no sabes qué. Tal vez sean más las ganas de que llegue algo que me sacuda, que me movilice, que me quite de este estado de orchatéz  mental que me tiene maniatada. Es como si no entrara en razón, como que me cuestionara hasta el  ¿para qué pensar?, como si esto último dependiese de mi voluntad solamente.
Sé que para nadie la vida es color de rosas todo el tiempo, ni siquiera por períodos demasiado extensos a veces, pero digamos que últimamente estoy estancada en la zona de los grises y no logro salir de ahí¡¡¡
Por un lado, late una Zully que quiere salir corriendo por la playa –aún con lluvia- y gritar, cantar, zambullirme en el mar, respirar a pulmón lleno; retomar mis clases de salsa, reírme a mandíbula partida con mis compañeros, salir de esta caparazón –te copié, Angel- que me mantiene distanciada de las cosas que mas me gustan. No quiero renunciar a mis sueños de ayer; no quiero mirar mis metas y pensar “qué lejanas, nunca lograré alcanzarlas”. No quiero ni puedo permitírmelo
Sin embargo por otro lado existe una Zully que está inmersa en cumbres borrascosas, transitando entre nieblas, que por más esfuerzo que ponga de su parte, no logra arrancarse esa inercia de encima. Y me desespera¡¡¡ Me desconozco en éste estado, no me gusta, no soy la “yo” habitual, me siento otra desgastada y agotada.
Necesito YAAAAAA la llegada de ese destino que me lleve cerca, lejos, no importa donde, pero que me movilice, me arranque de éste lugar  interno en el que estoy y me despierte de este letargo, de ésta vida que hoy por hoy  vivo como ajena, con la que no me identifico.
Hoy mas que nunca  me digo a mí misma “NO SE LO QUE QUIERO, PERO LO QUIERO YA¡¡¡¡”



5 comentarios:

UnAngel dijo...

En esta vida todo es relativo. Tu otoño es mi primavera, y entrar al caparazón no es malo si no tardas demasiado en salir (yo acabo de asomarme fuera).
No te fijes metas más allá del día de hoy. El futuro es incierto y el pasado no existe. Vive hoy como un regalo y muestra tu sonrisa al espejo, derrocha hoy tu vida y no guardes nada para un mañana que nadie te puede asegurar.

Un beso de hoy.

Zully dijo...

Es que mira Angel, si hay algo que detesto en la vida es colocarme en situación de "víctima". No soy víctima de nada, excepto de las circunstancias que ocurren en mi entorno y de las que formo yo parte. Y si bien hay cosas que no dependen de mi resolución, me siento presa, atrapada como si así lo fuere. Sé que es algo pasajero -aún cuando no sepa el tiempo- y un día, de pronto, me encontraré despojada de la mochila que cargo. Quiero retomar las riendas y volverme en la que siempre fuí, quiero volver a vivir el día a día como si no existiera mañana.
Retomé un diálogo mas asiduo con Dios, el que desde un tiempo hacia atrás no era tan fluído. Y si la fé mueve montañas, imagino que me moverá hasta donde deba estar.
Un beso amigo, realmente eres Un Angel :)

Lidia G. dijo...

:

Lidia G. dijo...

ups! Se me escapó! :-)

Quería decir:

¡Menudo post que le has empaquetao al personal! :-)

Mira, niña, yo no soy NADIE para darle consejos a nadie sobre nada de nada, ni de cómo debe hacer o cómo no debe hacer nadie nada ... cada uno es dueño de su vida y hace con ella lo que le sale de las mismísimas narices y cómo le sale de las mismísimas narices! Faltaría más!

Lo que sí está claro es que tú un día te dirigiste a mí cuando más lo necesitaba y si lo que leo en tu post es tal cuál lo transmites, lo mínimo que puedo hacer yo por ti es colgarte este mini-comment.

Las nieblas y las tinieblas están cojonudas para verlas desde la distancia (o en las pelis) pero pueden ser unas cabronas cuando amenazan con instalarse en nuestra mente y nuestra alma ... así que como tú eres una mujer valiente, como lo son la mayoría, no me cabe la menor duda de que les presentarás batalla, como hice yo en su momento ... como hacemos todas.

Creo que no hay técnicas ni estrategias válidas para todos, pero de todos modos te contaré la mía: cortar por lo sano con todo aquello que te hace daño (claro que primero tendrás que saber qué es lo que te hace daño, a veces, es muy sútil) ...

Te envío un abrazo MUY POSITIVO, que te transmita luz para salir de esas tinieblas, y libertad para lo que necesites, o lo que tú quieras.

Zully dijo...

Aidí, mi queridísima españolita. Parece que éste año ha comenzado cargado, eh? Sé que la niebla no se instala para siempre, sé que en algún momento descampará y podré ver todo mucho más claro.
De momento, estoy comenzando por sacar las malezas pequeñas que tengo a mi alcance y que sí logro ver bien. Ya luego lo que no se deja ver bien de momento, se irá haciendo poco a poco mas visible.
No sabés cómo he recibido tus rayos. Hoy además aquí, el sol está a full, pese al otoño.
Un besazo gigantesco pa´ti